- Entendimiento: investigamos, leímos el libro (adri completo, yo voy en la mitad) y consultamos a nuestros asesores
- Aplicamos el método Adri y yo, fue fácil, pero igual no dominamos la teoría
- Lo socializamos con el equipo: aquí empezó lo bueno y lo difícil ya que normalmente estas teorías si son explicadas por un experto son aceptadas de mejor manera, en este caso, el equipo se resistió. Eso si, ya hoy en día le tienen el tiro
- Disciplina, todos los días a las 9 durante 1 hora o menos nos sentamos a coordinar, que hicimos ayer, que haremos hoy y que nos está haciendo ir lento (cuáles obstáculos tenemos) todo con el objetivo de entregar y mejorar todo el tiempo
Pocos son los que cuando la corriente están en contra se ponen a pensar en cómo se debe nadar. Eso somos nosotros, unos revolucionarios que muchas veces no son comprendidos por la sociedad, buscamos cambió, hacemos cambio y empoderamos cambio en las personas. Creemos en un sistema transparente y colaborativo donde todos los humanos pueden aportar y ayudar para hacer del mundo un mejor lugar.
La primera vez que escuchamos sobre este tema de SCRUM un amigo personal, Nicolás de Somos Verticales llegó a mi oficina afanado, como suele estar, con ganas de compartir una idea que hace que uno haga el doble en la mitad del tiempo.
La idea era esta, si uno organiza las tareas bien, las disminuye al entregable mínimo y busca entender muy bien el norte de la organizaciön puede realmente generar valor en corto tiempo (sprints) y entregar calidad. Suena hermoso, pero aplicarlo no es tan fácil. El proceso lo vivimos de la siguiente forma: